Cuando el lobo se enamoró de Caperucita es un divertimento. Fue sencillo. Sólo tuvimos que dejar abiertas las puertas del cuento de Charles Parrault para que saliera quien lo deseara. Así salieron Caperucita, el Lobo, la Abuela , el Cazador …pero el Lobo vino con el corazón herido por las flechas del dios Cupido. Esa herida de Amor convocó a otros personajes , que posiblemente estuvieran vagando por espacios literarios, esperando que el aullido producido por un mal de amores los llamara…Y aquí están. Y entre todos crearon este nuevo cuento…este nuevo divertimento.
Javier Villanueva